26 junio 2006

"MÁXI MO GOL"


Golazo. El zurdazo memorable de Maxi Rodríguez aterriza en el arco mexicano. Sánchez nada puede hacer. Es el segundo gol argentino. Es el pase a cuartos de final.
* Argentina venció a México por dos tantos a uno y avanzó a cuartos de final en un partido tenso y emotivo. Recién en el minuto siete del primer tiempo suplementario y a través de un golazo de Maxi Rodríguez, el equipo albiceleste pudo tranquilizarse y abrazar la victoria. México fue un durísimo rival, ganaba uno a cero con gol de Márquez, luego Borgetti en contra puso el uno a uno.
Se viene el gran choque ante Alemania, el viernes en Berlín.


Qué valor toma esta victoria!! Ante un rival durísimo, complicado, bien preparado para defender y cerrar espacios, para sacar provecho en la altura de las pelotas paradas, de hecho a los cinco minutos ya ganaba con gol de Rafael Márquez producto de la explotación de esa jugada quieta, el tiro libre y en otros momentos los córners, que también complicaron.
Se sabía que el partido no iba a ser sencillo para Argentina, especialmente lo razonaba el cuerpo técnico y los jugadores, que ya habían tenido varios enfrentamientos por distintas competencias ante los mexicanos. Y así fue. Costó por lo mencionado y porque a la selección de Pekerman le faltaron ideas y variantes para suplantar le repetitiva pausa que Riquelme le imprimió al equipo, muy marcado por los aztecas. Faltaron también las asociaciones para llegar claro al arco de Osvaldo Sánchez. Y este señalamiento conlleva igual de importancia sobre lo que nunca puede faltar en un equipo con grandes aspiraciones: actitud para ir a buscar los partidos. Y ahí Argentina dijo presente, por eso la victoria fue merecida aunque sufrida, trabajada, perseverante. Y con un ingrediente nuevo, esta vez el equipo fue perdiendo y dio vuelta el resultado, puso corazón. Y le tiró la historia a México en la cancha, agregando ese plus tan mencionado en los argentinos que tiene que ver con la personalidad y el cáracter para afrontar las paradas bravas, contrarrestando el también famoso "miedo escénico", concepto nacido de los labios de Jorge Valdano.

TANTO POR TANTO
Fue fundamental el rápido empate argentino a los nueve minutos cuando Riquelme ejecutó el tiro de esquina que Borgetti cabeceó en contra de su propia valla influenciado por la exigencia de Hernán Crespo. Era el alivio, el recomenzar el partido.
Hablar de supuestos no es muy útil para reflexionar sobre los hechos ya consumados, pero la pregunta se instala por fuerza propia: ¿ qué hubiera pasado si Argentina no lograba la igualdad en la primera etapa, teniendo en cuenta el cerrojo defensivo que los aztecas impusieron en el encuentro? No se puede saber, pero lo que sí es cierto es que Argentina hubiese estado igual de obligada a como estuvo en el complemento, pero con menos tiempo, obvio.
Luego del resultado emparejado, el partido también se hizo amigo de este adjetivo, porque los de Lavolpe se impusieron (no siempre) en el mediocampo, haciendo retrasar a Riquelme, ganando los sectores de recuperación, traslado y elaboración, pero fallaron justamente en esto último, les falta ( y no decimos les faltó) un enganche, un creador, un diez. Aunque llegaron un par de veces, primero con Jared Borgetti que fue interceptado en su remate tras un pase de su compañero de ataque Francisco Fonseca los 13 minutos y luego con un tiro desde afuera del área del mismo delantero que el Pato Abbondanzieri rechazó con mano cambiada espectacularmente al córner, iban 24.
La doble ocasión de gol protagonizada por el nueve mexicano también fue patrimonio del nueve argentino, Hernán Crespo, cuando lo habilitó Cambiasso y no pudo definir y luego la más clara, otra conexión del Cuchu y el mano a mano del atacante que terminó con una definición por arriba de Sánchez, la redonda se fue cerca del palo izquierdo del arquero mexicano.
No funcionó el circuito ofensivo argentino, Saviola no hizo diferencia por las puntas, Crespo no pudo generar más espacios para ser aprovechados aunque tuvo sus chances, Maxi no logró llegar como nos tiene acostumbrados y lo dicho, Román estuvo impreciso, improductivo y cuando eso pasa, se nota bastante, aunque ya no estuviera en cancha uno de sus marcadores, Pavel Pardo, que se había ido lesionado.
LA APUESTA DE JOSÉ
Pekerman vio y observó una leve mejoría en el equipo en el segundo tiempo cuando parecía que Argentina iba a empezar a llegar más. Es que Maxi obligaba a Sánchez con un tiro mordido después de un pase a distancia de Román desde la ejecución de un tiro libre y más tarde, el mismo diez dejaba solo a Saviola para definir, pero el conejo demostraba que no estaba en su noche, lo contrario exhibido por el uno de los verdes.
Claro que José también pasó sobresaltos en el banco de suplentes, es que Borgetti no definió bien estando apareado por Sorín y Abbondanzieri volvió a demostrar que si no es el arquero más seguro en lo que va del mundial, pega en el palo.
Pero apostó José, se la jugó, entraron Tevez y Aimar por Cambiasso!! para dar movilidad al equipo y ayudar a Riquelme, luego Messi por Saviola, quedando Mascherano como único cinco y curiosamente mejorando su rendimiento.
El equipo varió tácticamente y algo en el juego, pero solo llegó claramente en el final del partido, fue gol de Messi después de pared y pase de Aimar, el árbitro suizo Massimo Busacca lo anuló cuando la televisión mostró que estaba en la misma línea Pablo.
Los últimos minutos fueron angustiantes para los sudamericanos, a tal punto de que México llegó con un cabezazo tibio de Fonseca que se fue cerca del palo derecho de Abbondanzieri.
Los dos querían el final y prepararse para el suplementario.
EL GOL DE OTRO PARTIDO
Fue el minuto 7 del primer suplementario, Argentina avanzó por izquierda, Sorín, de lado a lado, puso la pelota en el pecho de Maxi Rodríguez que estaba en el vértice del área, la fiera no lo dudó, sin dejarla picar y esperando su caída, le dio de lleno y de zurda, la redonda se clavó en el ángulo, de emboquillada, con un aterrizaje perfecto. Maxi abrió los brazos como un avión al ver la volada espectacular pero estéril de Sánchez y corrió para abrazarse con todos. Argentina pasaba a estar en frente en el marcador, sin jugar bien, es cierto, pero con justicia, cosas que en el fútbol se puede dar y de hecho, ocurre muy seguido.
Fue el fin para México, el golpe futbolístico justo, los aztecas supieron que cambiar esa realidad iba a ser prácticamente imposible. Y así fue, casi no tuvieron fuerzas físicas para intentar remontarlo.
Pasó el primer tiempo del alargue, en el segundo Argentina se dedicó a tener la pelota y Messi con Tevez hicieron algunas de las suyas, armaron una pared que casi define Carlitos, pero un resbalón no lo dejó culminar esa linda combinación.
El final volvió a repetirse, festejo con trapos y camisetas al aire (en conjunción con los hinchas argentinos presentes en el estadio) y una ilusión que se recorre paso a paso.
Argentina no jugó bien, pero no hay que dejar de lado ciertos factores a la hora de pensar en su rendimiento: sólo tres días atrás había jugado contra un rival como Holanda con pocos cambios (cuatro), siendo primero debió trasladarse a una ciudad más lejana (Leipzig) a la que hubiera tenido que ir si salía segunda y se enfrentó a un rival que mejoró su producción en relación a lo que había mostrado en la primera fase.
El próximo desafío será nada menos que el local, Alemania, el viernes 30 de Junio en Berlín. Dos equipos candidatos al título, una especie de final anticipada.
Los locales vienen en nivel ascendente, conjugando buen fútbol con contundencia. Argentina, con el peso de sus individualidades y la personalidad de su conjunto.
Será a todo o nada. No es poco.
Formaciones y estadísticas
ARGENTINA: Abbondanzieri; Scaloni, Ayala, Heinze y Sorín; Maxi Rodríguez, Mascherano y Cambiasso; Riquelme; Saviola y Crespo. DT: José Néstor Pekerman.
Cambios: st 30m Tevez por Crespo y Aimar por Cambiasso. 38m Messi por Saviola.
Amonestados: Heinze y Sorín.
MÉXICO: Sánchez; Márquez, Osorio y Salcido; Castro, Méndez, Pardo, Guardado y Morales; Fonseca y Borgetti. DT: Ricardo Lavolpe.
Cambios: pt 38m Torrado por Pardo. st21m Pineda por Guardado y 28m Zinha por Morales.
Amonestados: Márquez, Castro, Fonseca y Torrado.
GOLES: pt 5m Márquez (M), 9m Borgetti en contra (A). Suplementario, pt 7m Maxi Rodríguez (A).
Estadio: Zentralstadion, Leipzig.
Público: 43.000 personas, aproximadamente.
Árbitro: Massimo Bussaca (Suiza)
Julián Ezequiel Lichene

22 junio 2006

"IGUALDAD DESPAREJA"

El palo dijo no. El tiro libre de Riquelme en forma de buscapiés culmina con el rechazo del defensor holandés Boulahrouz y la pelota se estrellará en el travesaño. Argentina fue un poco más.


* Argentina y Holanda igualaron en el último partido del grupo"C" cero a cero en Frankfurt. El equipo de José Pekerman mereció el triunfo pero terminó conformándose con el empate que le dio el primer puesto y donde se las verá con México, el sábado en Leipzig. Holanda será rival de Portugal, el domingo en Nuremberg.

Así como hay cuentos de Córtazar en los que uno empieza leyendo por partes que no corresponden al principio de los mismos y desconoce el argumento; si nos detuviéramos en los últimos quince minutos del partido que protagonizaron Holanda y Argentina, todo pareciera indicar que el empate o un triunfo naranja hubiese estado en su justo lugar. Porque ahí pudo pensarse el trajín físico y psicólogico que genera disputar un mundial y más en una selección como la argentina, que desde hace 16 años no termina entre los primeros cuatros puestos de un torneo como este, el más importante, por cierto.
Es que en ese último cuarto de hora, el seleccionado que dirige ese gran nueve que fue Marco Van Basten, dejó una impresión que no se correspondía con el desarrollo del encuentro. Tuvo varios córners a su favor, más un disparo de Kuyt que el Pato Abbondanzieri (uno de los mejores en Argentina) se encargó de mandar al tiro de esquina y por último un tiro libre de su número diez Van der Varrt que el uno argentino controló con la mirada.
Tampoco existió una gran superioridad argentina sobre los holandeses, pero repetimos, de haber habido un ganador, ese era el equipo de José, que metió cambios contra un rival que tampoco dejó estática su formación titular. Pero empezemos por el principio y dejemos a Córtazar por el momento.
Pekerman sorprendió a último momento con la formación argentina, teniendo en cuenta las amarillas de Saviola, Crespo y Heinze, entraron Tevez, Messi (la mayor sorpresa) y Milito respectivamente. Sorín, el otro ausente, le dejó su lugar a Cufré, por algunas molestias.
Como primera idea, cuatro cambios que no cambian en demasía la estructura, pero que sí difieren en las particularidades mismas.
Porque Tevez y Messi, y ahora entrando en el terreno de las conclusiones post-análisis, no son ni funcionaron como la hoy dupla titular Saviola-Crespo. Se notó cómo Tevez (de más que aceptable papel) retrocediendo para participar en el armado de fútbol del equipo, perdió peso arriba, aunque él, por si mismo, haya generado situaciones de riesgo; y cómo Messi cayó en el individualismo con excesivo traslado del balón no sin mostrar pinceladas de su enorme talento. Pero hizo poco y se le vio algo que nunca hace: miró más el piso que el panorama, más la pelota que la ubicación de sus compañeros (lo cual no significa que sea un jugador egoísta) y se le hizo difícil hacer diferencia. Igualmente, el pibe, dejó huellas distintivas, habilitó y dejó solo a Cambiasso con un pase preciso a poco de comenzado el encuentro pero lo cruzaron justo al Cuchu cuando se prestaba a definir, remató al arco en el final de la primera etapa pero Van der Sar retuvo el balón y armó una pared con Riquelme a minutos de comenzado el complemento y el derechazo de Román se fue cruzado y desviado. Sin descuidar sus 18 años, se esperaba más de él.
Tevez conjugó su capacidad de resistencia física para aguantar a los rivales y su habilidad, se movió por los costados del ataque y se lo vio siempre activo, encarador, incisivo. Su mejor producción fue el toque atrás de espaldas para el remate que Maxi Rodríguez casi clava en el ángulo, allá promediando el primer tiempo; el quiebre de cintura y el derechazo posterior que el arquero holandés sacó al córner cuando la pelota se metía en el primer palo y el zurdazo alto del final, aguantando a los férreos defensores europeos y después de que Julio Cruz (ingresado por Messi) se la peinara.
En el mediocampo Riquelme no sobresalió a pesar de casi mete un gol olímpico y que a la salida de un tiro libre suyo bajo, al ras del piso, Boulahrouz haya estrellado la pelota en el palo de su arco. Es que siempre estuvo bien rodeado el conductor argentino y a eso hay que sumarle que careció de precisión, que es como que a un bombero le falte el agua para su tarea diaria.
Pero hay otro aspecto para señalar en esta parte del equipo. Maxi Rodríguez parece sentirse ( y se tradujo en el rendimiento) más cómodo por el sector izquierdo, colaborando con la marca y llegando al arco contrario, por derecha pierde sorpresa y está más contenido, tal vez porque el lateral de ses sector (Burdisso se fue lesionado y en su lugar entró Coloccini) no va al ataque y sí lo hace Juan Pablo Sorín por el otro.
En ese sentido, la lesión de Lucho González se torna más significativa, porque el volante del Porto portugués, es salida, juego y llegada por derecha, en cambio Cambiasso y Mascherano no parecen sincronizar bien sus movimientos y funciones compartiendo el sector medio del campo, por más que el puesto de cinco por ahora sea para el jugador de Corinthians y el Cuchu mantenga una cierta regularidad.
Igualmente Maxi Rodríguez se las ingenió para llegar, con el remate tremendo señalado anteriormente y con intentos que trajeron algo de peligro por su sector, en los dos períodos.
Defensivamente, Argentina no pasó grandes sobresaltos. Ayala controló muy bien a Van Nistelrroy, el ratón es uno de los pilares de la selección y por ahora uno de los mejores centrales del mundial, si no el mejor. Milito no desentonó (solo se equivocó al rechazar un balón que casi termina en gol de kuyt, en el segundo tiempo, si no fuera por los reflejos de Abbondanzieri), Cufré fue de menor a mayor (terminó anulando a ese interesante pero brusco volante zurdo que es Van Persie) pero Burdisso tuvo problemas con Kuyt el tiempo que estuvo (una duda suya casi termina en gol del rubio volante en la primera llegada holandesa) y Coloccini más tarde, no logró afianzarse totalmente.
Argentina llegó más y mejor pero no le alcanzó. Se quedó por diferencia de gol con el primer puesto del "grupo de la muerte", algo que no es poco y superó en el desarrollo a una gran medida que es esta Holanda, que controla la pelota frecuentemente pero que también defiende con los dientes apretados.
En octavos se viene México, empieza el mundial de los "plays-off", el del todo o nada, el de la continuidad de la puesta en práctica de las convicciones de una forma de jugar. Esperemos que siga dando frutos traducidos en resultados. Están las armas.



FORMACIONES Y ESTADÍSTICAS
ARGENTINA: Abbondanzieri; Burdisso, Ayala, Milito y Cufré; Maxi Rodríguez, Mascherano y Cambiasso; Riquelme; Tevez y Messi. DT: José Néstor Pekerman.
Cambios: pt.23m Coloccini por Burdisso. st.23m Cruz por Messi y 34m Aimar por Riquelme.
Amonestados: Cambiasso y Mascherano.
HOLANDA: Van der Sar; Jaliens, Boulahrouz, Ooijer y De Cler; Van der Vaart, Sneijder y Cocu; Van Persie, Van Nistelrooy y Kuyt. DT: Marco Van Basten.
Cambios: st.10m Babel por Van Nistelrooy, 21m Landzaat por Van Persie y 40m Maduro por Sneijder.
Amonestados: Kuyt, Ooijer y De Cler.
Estadio: Frankfurt.
Árbitro: Luis Medina Cantalejo (España)
Espectadores: 48.000 aproximadamente.

19 junio 2006

"FUE FÚTBOL TOTAL"


* ARGENTINA DESPLEGÓ UN FÚTBOL DE ALTÍSIMO NIVEL Y APABULLÓ A SERBIA Y MONTENEGRO CON UN CATEGÓRICO SEIS A CERO. TACOS, CAÑOS, TOQUES Y GOLES FUERON LOS ELEMENTOS DEMOSTRADOS POR LA SELECCIÓN QUE DIRIGE JOSÉ PEKERMAN. MAXI RODRÍGUEZ EN DOS OPORTUNIDADES, CAMBIASSO (CON UN TANTO MEMORABLE DE 26 TOQUES) , CRESPO, TEVEZ Y MESSI FUERON LOS GOLEADORES DEL PARTIDO. EL EQUIPO FUE FIGURA Y SAVIOLA FUE EL MEJOR; TODO PARA CLASIFICAR A OCTAVOS DE FINAL DEL MUNDIAL DE ALEMANIA 2006. ESPECTACULAR.

Sí, fue fútbol total, fue el equipo soñado, el partido perfecto, los goles del deseo colectivo e imaginario por donde se lo mire.
¿Cómo empezar esta crónica si el partido ante Costa de Marfil había dejado sesgos de dudas e interrogantes? Y así había sido, el seleccionado argentino había ganado pero no había justificado esa victoria como su rica historia manda, no había buscado ni encontrado la forma más elegante y efectiva a la vez (algo que en este fútbol tacticista y globalizado es tan difícil de conseguir) para llevarse los tres puntos.
Pero dadas las evidencias empíricas y las posteriores acciones prácticas, lo más imperioso, si de conclusión hablamos, en ese primer partido, era ganar y llevarse los tres puntos por sobre todas las cosas, aunque fuera con algunas dosis de sufrimiento.
Porque en este segundo encuentro ante Serbia y Montenegro, el equipo realizó "EL PARTIDO", desde principio a fin, siempre tocando, buscando espacios, con paciencia, triangulación y goles, lo esencial en el fútbol.
Porque se pueden hacer uno o dos goles a causa de fuentes fortuitas, pero no seis, ahí, claramente, existe una causalidad directa para llegar a semejante diferencia y en un mundial, esto toma mayor relevancia.
Y esa relación direccional fue en base al juego demostrado desde un primer momento, donde con una serie de toques en pares, a los cinco minutos, Argentina ya ganaba uno a cero con una infrenable llegada de Maxi Rodríguez para definir con precisión a media altura del arquero Jevric, tras una gran habilitación de Saviola.
Dijimos, desde el minuto cero, el seleccionado de Pekerman tuvo actitud para jugar, para neutralizar al rival y para hacer de la solidaridad, una bandera de equipo.
El cambio de Lucho González por Cambiasso en relación al partido anterior, era una modificación significativa venidera desde la dirección técnica, el objetivo era tener más la pelota y mejor, buscar sorpresa en los costados (lo bien que rindió Maxi Rodríguez por la izquierda) y acompañar a Riquelme en la elaboración de jugadas. Y Román no fue única aduana creativa, especialmente en la primera etapa y en gran parte a causa de la marcación personal que le puso Serbia y Montenegro. Entonces hubo variantes para aparecer y buscar por otros lados. Positivo.
Serbia y Montenegro se paró a esperar, con Kesman y Milosevic arriba para intentar vulnerar a una defensa argentina siempre sólida, con Koroman tratando de desnivelar por derecha (casi nunca pudo con Sorín) y con la mirada puesta en ver cómo se lograba una muralla que hiciera chocar a los sudamericanos.
Pero Argentina fue incontenible al avanzar y al atacar, paciente para recuperar y construir. Y, fundamentalmente, puro lujo, puro toque, pura triangulación, puro fútbol argentino, el que nos gusta, el que queremos.
Después de que Djordjevic rematara de zurda y desviado, Argentina volvió a tomar riendas y Riquelme armó una pared con Cambiasso (de vuelta en cancha por una tempranera lesión de Lucho González que obligó a Pekerman al cambio y a posicionar al volante del Inter por el sector derecho) , pero su zurdazo no tuvo dirección.
Al Cuchu le tocó ser el hombre que culminó una jugada que quedará en la historia y en la memoria de todos los hinchas del fútbol. Iban 30 minutos. Fueron veintiseis pases, la tocaron casi todos los jugadores, pura solidaridad y dinámica con cambio de ritmo, hasta que Saviola (la gran figura albiceleste) construyó una pared con Riquelme, el conejo se la cruzó a Cambiasso que entraba por la derecha y éste habilitó a Crespo en el área, a Hernán le quedó atrás el balón, entonces metió un taco que dejó a Cambiasso de cara al arco, el zurdazo del volante se coló por arriba, al medio.HISTÓRICO, SENSACIONAL, MEMORIOSO, EMOCIONANTE. Un gol que quedará por siempre en cualquier recuerdo referente a campeonatos mundiales. Ya, el mejor gol de este mundial, difícil de superar.
En media hora, el partido tenía dueño absoluto y llegadas a un mismo arco.
En otro aterrizaje argentino, Saviola habilitó a Crespo que definió con suavidad pero en un off-side que no existió, como el nueve siguió la jugada sin escuchar el silbato del árbitro (según sus propios gestos) injustamente recibió la tarjeta amarilla.
Los europeos no tenían respuestas y Argentina no cesó en su búsqueda ofensiva, en un pelotazo casi perdido, Saviola peleó el balón ante un defensor rival, lo ganó, gambeteó a otro, definió cruzado, el arquero la desvió y apareció Maxi Rodríguez otra vez por izquierda para definir con el arco casi a su antojo. Tres a cero, goleada en cuarenta minutos. El partido, por desarrollo y resultado, estaba definido.
También vale mucho destacar la otra cara funcionalista de un equipo, la defensiva. Porque Abbondanzieri fue pura seguridad, especialmente en cada centro donde más se le reclamaba al Pato y teniendo en cuenta la importante altura de los serbios, el uno de Boca siempre atenazó las pelotas y nunca dio rebote.
Burdisso, Ayala, Heinze, Sorín, Mascherano, Cambiasso y Maxi Rodríguez, siempre estuvieron atentos, tanto en la marca como en los relevos, y nunca se dejaron sorprender por los europeos.
En síntesis, un funcionamiento casi perfecto y dando espectáculo al por mayor. El fútbol, agradecido.



PAUSA Y VUELTA
En el segundo tiempo, Argentina bajó un poco los decibeles, Riquelme comandó la pausa, el tiempo de circulación exclusiva del balón, para que Serbia y Montenegro saliera pero no lo hacía en los primeros minutos, aunque luego comenzó a animarse un poco, como cuando Milosevic pateó con su pierna izquierda, fuerte, abajo y Abbondanzieri se esforzó para mandar la pelota al córner.
Pero siguió Argentina, su diez tomó más el balón (su marca personal ya no estaba en cancha) , se adueñó totalmente de la creación y comenzó a repartir juego, con más libertad, claro.
A los cinco habilitó a Crespo, que buscando su gol como buen goleador, trató de vulnerar el arco rival pero el arquero Jevric se lo impidió.
Serbia y Montenegro de vio obligado a ir en busca del descuento, si es que quería por lo menos poder obtener un resultado digno en este partido, el ingreso de Ljuboja le dio algo de cambio de velocidad, pero fue solo un ratito. En ese lapso, el rubio volante desbordó por la derecha, con su zurda envió un centro que bajó de cabeza Kesman para Milosevic, el cabezazo del delantero del Osasuna español fue débil y eludió el arco. Ese intento duró poco porque la brusca patada de Kesman a Mascherano dejó a los de Petkovic con diez jugadores y ahí sí que cualquier intento de reacción fue absorbida por una renuncia inconsciente por atacar y lastimar.
Encima entraron Tevez y Messi (primero el Apache por Saviola y más tarde el rosarino por Maxi Rodríguez) y se reavivó la fantasía, los toques de primera, los sombreros, los caños, las paredes, los goles. Enseguida Tevez se retrasó y comenzó a hilvanar juego con Riquelme, con espacios y ataque constante.
En una de las siguientes acciones, Román habilitó con un taco a Crespo que fue derribado cuando se relamía para definir, el penal no fue sancionado por el árbitro italiano Roberto Rosetti.
La última llegada de Serbia y Montenegro fue una corajeada de Gravancic que terminó en un disparo al primer palo, transformado en córner.
Y luego, en menos de quince minutos, Argentina terminó de aplastar futbolísticamente a su rival con tres goles de gran factura.
A los 32, Riquelme habilitó con velocidad y picardía a un Messi explosivo (al mejor estilo Maradona-Caniggia en el segundo gol ante Nigeria en el mundial de 1994) , el juvenil desbordó y , más que un centro, fue un pase para que Crespo entrara por el segundo palo y empujara con su zurda el esférico a la red. El nueve cumplía con su función primordial y con una actuación acorde con la de su equipo.
Seis minutos más tarde, a los 38, Riquelme abasteció una vez más a Carlos Tevez, el delantero encaró a un defensor y lo pasó con un caño, trabó el balón con otro y definió con el manual, cabeza levantada, parte interna del pie, a un palo, cruzado, golazo.
La frutilla del postre la puso el pibe Messi, este crack en vías de convertirse en estrella mundial (esperemos por el fútbol que así sea) recibió un pase de Tevez por derecha, puso quinta velocidad y definió con la diestra, su pierna menos hábil, seco, al primer palo del arquero Jevric a los 42 del segundo tiempo. La histórica goleada se transformaba en realidad.
JUEGO Y EMOCIÓN
El prestigioso periodista deportivo, Horacio Pagani, en su columna del diario Clarín del pasado domingo (11 de Junio) y luego de haberse vivido el día anterior el partido ante Costa de Marfil, destacaba la importancia de los tres puntos conseguidos no sin mencionar y señalar los aspectos negativos del equipo en dicho encuentro. El título de su nota era: "AHORA HAY QUE SUMAR JUEGO". Y fue como si los jugadores y el técnico hubiesen leído y consensuado ese texto. Y lo plasmaron en el verde césped, a decir de Ángel Labruna.
El final fue a puro trapo, a pura conexión entre los jugadores y su gente, revoleando, con los torzos desnudos, la pilcha que se tuviera a mano, una comunión emocionante. Este partido y este equipo, con esta demostración, caló en el corazón de la gente, que se vio identificada en él, aquí y allá.
Es cierto que Serbia y Montenegro no venía bien, con problemas políticos, divisiones, planteos al técnico. Pero esto no opaca la gran producción argentina, que se permite soñar, aunque todavía falte mucho, aunque no se haya ganado ningún título, pero disfrutando del momento, que tan lógico y merecido se tiene.
"AHORA HAY QUE SUMAR JUEGO", vaya si tenía razón Pagani....
Formaciones y estadísticas
ARGENTINA: Abbondanzieri; Burdisso, Ayala, Heinze y Sorín; Luis González, Mascherano y Maxi Rodríguez; Riquelme; Saviola y Crespo. D.T.: José Néstor Pekerman.
Cambios: p.t. 16m Cambiasso por Luis González, s.t. 13m Tevez por Saviola y 29m Messi por Maxi Rodríguez.
Amonestado: Crespo.
SERBIA Y MONTENEGRO: Jevric; Duljaj, Gavrancic, Dudic y Krstajic; Koroman, Nadj, Djordjevic y Stankovic; Kesman y Milosevic. D.T.: Ilija Petkovic.
Cambios: s.t. Ergic por Nadj, 4m Ljuboja por Koroman y 24m Vukic por Milosevic.
Amonestados: Nadj y Krstajic.
Expulsado: s.t. 19m Kesman.
GOLES: pt 5m Maxi Rodríguez (A), 30m Cambiasso (A) y 40m Maxi Rodríguez (A).
st 32m Crespo (A), 38m Tevez (A) y 42m Messi (A).
Árbitro: Roberto Rosetti (Italia)
Estadio: Arena AufShalke, de Gelsenkirchen.
FOTO: "EL EQUIPO QUE DIO CÁTEDRA"
La formación de la selección argentina que enfrentó y apabulló a Serbia y Montenegro por 6 goles a 0. Luego entraron Cambiasso (por Lucho González lesionado), Tevez y Messi, nada menos, y los tres convirtieron. Quedará en la historia como una exhibición de fútbol brillante y la demostración de que en el 2006, se puede jugar bien a la pelota.
Julián E. Lichene

15 junio 2006

"TRES PUNTOS Y PUNTO"


*La selección argentina arrancó con un ajustado triunfo su debut en el mundial de Alemania 2006 al vencer al difícil Costa de Marfil por dos tantos a uno. Los goles albicelestes fueron marcados por Crespo y Saviola en la primera etapa, Drogba descontó para los africanos a ocho minutos del final. Argentina sufrió hasta la conclusión del cotejo, no jugó bien y su victoria se transformó más en un elemento de necesidad que en un hecho de justicia.

El pitazo final encontró a los jugadores argentinos abrazándose y celebrando una victoria no inmerecida pero sí, poco justificada. Tal vez la causa de esta conducta no sea una sola, se puede pensar en la rápida eliminación en Corea-Japón, en que clasifican dos por grupo y no mejores terceros como antes o en valorar la calidad del rival, que si bien debutaba en el mundial, no fue una presa fácil.
Lo cierto es que Argentina no jugó como se espera de ella, debido a la potencialidad futbolística de la mayoría de sus jugadores. E l equipo, posiblemente, no sea justamente eso, un equipo, por poco tiempo de trabajo y conformación, pero también eso sucede en casi todas la selecciones, a excepción de la brasileña, que juega con los mismos jugadores desde hace años y eso hace que corra con ventaja.
Pero lo más preocupante es que Argentina no tuvo mucho tiempo la pelota y cuando la tuvo, generó poco, a tal punto que Costa de Marfil le ganó el duelo en la faz "situaciones de gol y tenencia del balón". Los africanos siempre hicieron circular la pelota por cualquier sector de la cancha ( si hasta con el arquero comenzaban así las jugadas), impusieron esa interesante combinación de potencia física, velocidad y habilidad y el equipo de Pekerman pasó sustos.
El director técnico argentino decidió un planteo no defensivo, pero sí cauteloso, o por lo menos, no todo lo ambicioso que se espera de esta selección. Su dupla de ataque elegida fue Saviola-Crespo, que le dieron resultados ya que ambos delanteros convirtieron los goles argentinos, pero en el banco y sin ingresar quedaron Tevez y Messi, dos jóvenes con experiencia pero fundamentalmente con desequilibrio.
Dijimos que los africanos complicaron a los argentinos y desde temprano, Akalé le ganó por la izquierda a Burdisso ( de floja actuación) y en cinco minutos generó dos situaciones, la primera terminó con un cabezazo de Drogba que se fue por arriba del travesaño, la otra con un remate del anteriormente mencionado volante que también se fue desviado.
Fueron dos avisos, hasta que Argentina comenzó a manejar medianamente el balón, aunque su peligrosidad se construyó a partir de las pelotas paradas efectuadas por Román Riquelme y en una de ellas la jugada terminó polémicamente. Fue a los catorce minutos cuando Roberto Ayala, el mejor jugador argentino de la cancha, se elevó tras un córner del diez, su cabezazo lo contuvo irregularmente y en dos veces el arquero Tizié pero se vio claramente que el balón había ingresado o por lo menos apenas traspasado la línea. El árbitro belga De Bleckeere, increíblemente no lo convalidó.
A partir de esta acción, Argentina logró imponerse aunque sin claridad, Riquelme comandó más el ataque y Sorín se proyectó más, pero ni Mascherano ni Cambiasso se destacaron en lo que mejor saben hacer que es el robo de pelotas, por eso los africanos ganaron en el mediocampo a partir de su dominio dinámico.
Pero Argentina pegó primero, el tiro libre de Riquelme terminó en una pelota suelta en el área y estaba ahí Crespo, donde debe estar, para empujarla al gol y reencontrarse con él. Uno a cero.
Paradójicamente Costa de Marfil empezó a llegar más y Argentina NO SE AGRANDÓ FUTBOLÍSTICAMENTE, al contrario, se replegó para salir de contragolpe, sino a las pruebas remitirse, en una rápida respuesta, Riquelme, con un pase propio de Michael Jordan en la NBA (mirando para un lado y habilitando para el otro) dejó solo a Saviola que tocó el balón a la red anticipándose al arquero Tizié. Dos a cero, tranquilidad, efectividad, contundencia pero poca fantasía y producción futbolística combinados con un frágil mediocampo.
Costa de Marfil tuvo sus oportunidades antes y después del dos a cero a través de un remate de Kalou desviado, un cabezazo de Keita que Abbondanzieri salvó milagrosamente entre sus piernas y no faltaron las exigencias casi interminables de Drogba que Ayala y Heinze (especialmente el primero) trataron de neutralizar y lograron a veces.
El entretiempo dejó una premisa casi irrefutable: la ventaja argentina en el marcador era un premio grande como el estadio de Hamburgo.

AGUANTE ARGENTINA
Suele pasar que cuando un equipo se defiende es porque el otro lo está atacando o porque quiere que lo ataque. Pasó lo primero, no tanto lo segundo. Tal vez a Costa de Marfil lo asustó la contundencia criolla y quizás por eso no fue a buscar desesperadamente el descuento, aunque siguió dominando campo y balón.
Lo cosechado por los de Pekerman en la segunda etapa: un remate de Maxiliano Rodríguez tras una habilitación de Saviola que se fue por arriba del travesaño, un tiro libre-centro de Román cerquita del segundo palo africano y un sablazo de Riquelme que obligó al arquero a un rebote que Rodríguez cambió por gol pero que fue bien anulado por fuera de juego señalado por el juez de línea. Solo tres ocasiones!! Las únicas llegadas del complemento, no más que eso, lo demás a cuidar el resultado. Fue una estrategia totalmente conservadora teniendo en cuenta también los cambios realizados (Palacio por Crespo, Lucho gonzález por Saviola y Aimar por Riquelme, en el final del encuentro) en donde el delantero de Boca Juniors quedó solo en el ataque y con, por lo menos dos defensores marcándolo constantemente cuando se dispone de otros cuatro. Es verdad que era el primer partido, pero eso no justifica la actitud tomada por el entrenador y acatada por los jugadores cuando ni siquiera se sufrió expulsión alguna que pudiera servir de argumento.
Los marfileños fueron animándose y visitaron el arco del pato Abbondanzieri, quien siempre respondió en forma correcta.
Primero remató cerca y por arriba Koné y luego Drogba desvió un tiro libre y la pelota se fue besando el palo izquierdo del uno argentino. Hasta que a ocho del final, el delantero del Chelsea inglés, Didier Drogba, se tomó revancha y con un zurdazo cruzado y luego de recibir un centro para atrás, puso el 1-2 suspensivo.
El temor invadió a los argentinos y el equipo albiceleste priorizó defender el resultado y no agrandarlo para afirmarlo.
No les quedó tiempo a los de Michel y Argentina festejó la victoria que le da fuerza anímica por sobre todas las cosas para encarar lo que viene. Pero se debe tener en cuenta que esta no es la obra a representar con los actores que se tienen a disposición.
FORMACIONES Y ESTADÍSTICAS
ARGENTINA: Abbondanzieri; Burdisso, Ayala, Heinze y Sorín; Maxi Rodríguez, Mascherano, Cambiasso y Riquelme; Saviola y Crespo. D.T.:José Néstor Pekerman.
Cambios: s.t.19m Palacio por Crespo, 31m Luis González por Saviola y 45m Aimar por Riquelme.
COSTA DE MARFIL: Tizié; Eboué, Touré, Meité y Boka; Keita, Yayá Touré, Zokora y Akalé; Drogba y Kalou. D.T.:Henri Michel.
Cambios: st. 10m Dindane por Kalou, 16m Koné por Akalé y 33m Koné por Keita.
GOLES: PT.24M CRESPO (A) Y 37M SAVIOLA (A). ST.37M DROGBA (C.M.)
Estadio: Hamburgo.
Árbitro: De Bleeckere (Bélgica)
Amonestados: Heinze, Saviola y Luis González (A) Drogba y Eboué (CM)
FOTO: "DONDE TENÍA QUE ESTAR"
EL GOLEADOR ARGENTINO, HERNÁN CRESPO, CUMPLE CON SU FUNCIÓN, EMPUJA LA REDONDA A LA RED Y ABRE EL CAMINO DE LA VICTORIA. CASI NO TUVO CHANCES, PERO EN UNA SOLA OPORTUNIDAD CONVIRTIÓ, COMO LOS GOLEADORES DE RAZA. TOURÉ, DROGBA Y TIZIÉ LO SUFREN.
JULIÁN LICHENE

04 junio 2006

"El mundial que veremos" (Pagani,Varsky y Macaya Marquez)

A continuación podremos leer, pensar y reflexionar sobre las ideas de tres reconocidos periodistas deportivos acerca del venidero mundial que ya nos invade.Desde claras y diferentes vertientes ideológicas,Horacio Pagani,Juan Pablo Varsky y Enrique Macaya Márquez exponen sus pensamientos sobre la actualidad de nuestro seleccionado .Para destacar,la brillante refutación de Pagani a las alarmistas predicciones de Macaya Márquez,las precisas estadísticas de Varsky en base a nuestra selección y un ambiente atento a tres miradas distintas sobre las posibilidades en Alemania del equipo de José Pekerman.
La mesa de debate la organizaron los hombres de la editorial futbolística,ediciones Al Arco,en el famoso y porteño café Tortoni el 16 de diciembre del 2005.

COORDINADOR:Con respecto al "grupo de la muerte"que le tocó a Argentina,quisiera saber si se puede hacer un análisis independiente de la teoría de la conspiración y graficar qué grupo le tocó a Argentina.
ENRIQUE MACAYA MÁRQUEZ:¿Teoría de la conspiración?(como desentendido).
COO.:Sí,sobre la zona de la muerte que le tocó a Argentina.
E.M.M.:Yo creo que,con conspiración o sin conspiración,no hemos encarado un análisis exhaustivo y profundo acerca de las posibilidades que tienen nuestros adversarios,nos ocupamos sí de ellos,pero no nos ocupamos de nosotros,que es lo que a mi más me preocupa.
Es casi imposible pronosticar el rendimiento de un equipo antes de un mundial.Se levantaron ese día los jugadores y....La cosa no es tan sencilla.El enemigo es la selección argentina.Es el bajo rendimiento o es lo que no sabemos,creo que hay que preocuparse notoriamente;si pasa primera ronda,tendrá que enfrentarse con Alemania de un lado y con Brasil por el otro.Lo de Brasil,creo,si no me equivoco,sería en semifinales y lo de Alemania será en cuartos.Creo que son los dos adversarios a vencer.También creo que el rendimiento argentino no es el mejor porque el nivel así lo dice.
HORACIO PAGANI:Hola,buenas noches.Eh,yo pienso todo lo contrario a lo de Macaya.Cuando fue el otro mundial,que todo el mundo tenía sobrado optimismo,yo pensaba que iba a ser muy difícil y me atreví a decir que Argentina no pasaba la primera ronda.Así ocurrió,de casualidad ¿no?,porque Argentina pudo haber pasado la primera ronda,le pudo haber ganado a Suecia.Mi preocupación estaba dada porque creía que Argentina no estaba jugando al estilo argentino. Jugaba de una manera europeizada y esto jugando con o sin europeos, le iba a traer inconvenientes, pensaba. Esta vez creo que Argentina va a jugar de otra manera, diferente a como jugó el mundial anterior, mucho más emparentada con el criterio del fútbol nuestro y yo digo que hubo una prueba importante que se hizo hace poco en Ginebra contra Inglaterra (se refiere al encuentro Argentia 2-inglaterra 3), rival justamente con estilo contrario y en la lucha estílistica, el equipo argentino ganó ampliamente, a mi gusto. Las circunstancias del partido lo hicieron perder, lamentablemente, en los últimos minutos. Un partido que había merecido ganar, especialmente en el primer tiempo y que se dio la circunstancia de que el entrenador tuvo que hacer tres cambios obligados por jugadores que no estaban en buenas condiciones, con fatigas musculares, obvio, es una etapa difícil ésta para los jugadores, estamos a fin de año. Y yo creo que esta vez el equipo argentino, bien preparado, con alguna incorporación o más, con alguna entrada de frescura de algún jugador que esté aquí, no mucho más de dos, no creo que puedan llevarse más de dos jugadores porque sino sería como resentir la estructura y pensar que todo lo que se hizo hasta ahora no sirve. Pero soy optimista en que Argentina va a jugar y va a explotar su manera de jugar, por ahí el único peligro es que tiene un sólo jugador eje en el equipo que es Román Riquelme, que para mi gusto es el mejor estratega del mundo, y que con él, el equipo funciona como me gusta a mi y como creo que le gusta a mucha gente en Argentina y, bien preparado este equipo y con todavía seis meses por delante, yo creo que va a tener buenas posibilidades de llegar lejos, no sé adónde, presumo que puede llegar a semifinales.
JUAN PABLO VARSKY:Creo que los argentinos pasamos fácilmente del optimismo al fatalismo. La sensación que teníamos en diciembre del 2001, justo cuando pusieron el corralito acá, era que no importaban los ingleses, los nigerianos, ni los suecos, el equipo los iba a pasar por arriba a todos.
Y ahora la sensación es que holandeses, marfileños y serbios nos van a dejar afuera del mundial. Creo que es algo que nos distingue como sociedad, pasar de un extremo a otro violentamente.
Yo quiero hacer un análisis respecto de cómo se hace el sorteo. Me parece que para enterrar cualquier idea de conspiración, hay una realidad de FIFA.FIFA establece criterios deportivos par cabezas de series y criterios geográficos para los veinticuatros equipos que no son cabezas de serie. Entonces,al haber esta diferencia de criterios, chocan en un mismo grupo Holanda, Costa de Marfil y Serbia y Montenegro, tres equipos que por ránking FIFA y actualidad, podrían estar en el mismo combo o bolillero porque son, puntos más puntos menos, tres buenos equipos. No hay una explicación deportiva para este sorteo, sí la gran diferencia que hay entre los cabezas de serie, que son elegidos por mérito deportivo, y los otros veinticuatro equipos que son agrupados para que no se choquen tres europeos en una zona, dos equipos de la CONCACAF, dos sudamericanos, etc.
Creo que la gran enseñanza que por lo menos a mi me dejó el mundial pasado es que hay que estar bien ese mes. Y es este un país totalmente periférico, no tiene una competencia continental fuerte, la copa Ámerica se limita a un duelo con Brasil, se reduce a cero la posibilidad de quedarse afuera de un mundial con este formato de eliminatoria, de diez equipos hasta cinco pueden entrar, o sea, un equipo que termina en mitad de tabla puede jugar un mundial, todos contra todos en dos ruedas, desarrollado en tres años, no hay un equipo que en un mes se inspira como Colombia en el '93, te pinta la cara, te hace cinco goles y te manda a jugar un repechaje con Australia. Acá lo único que importa es el mundial lamentablemente. Toda la presión se concentra en Junio del 2002, 2006, 2010, porque lo que pasa entre mundial y mundial para el seleccionado es probar jugadores, sacar o hacer una renovación, pero no hay una competencia fuerte. En cambio en Europa está la Eurocopa, la clasificación para la Eurocopa y la clasificación para el mundial. Están todo el tiempo en competencia permanente, Argentina no. Entonces, estamos todos con toda la energía puesta en el mundial.
Pensando en el equipo, a mi me preocupan dos cosas: una dentro de la cancha que me parece que es una incompatibilidad que por ahora no han podido saldar Riquelme y Crespo. No se entienden, no se buscan, no se pasan la pelota. Cuando Crespo pica, Riquelme se la tira al pie. Todo lo que sea con charla, con diálogo y con profunda conciencia de equipo, puede darse vuelta.
Y la otra es que me parece que todos los jugadores del seleccionado todavía no aceptan, para mi, la futura inclusión de Messi. Messi es un jugador diferente, que juega a otra marcha, que agarra la pelota y gambetea y yo creo que todavía el equipo no lo ha reconocido como un legítimo jugador titular. Hace seis meses era el veintitrés, y ahora quizás sea el once. O sea, hablando de titulares y suplentes, ahora habrá que buscar otro veintitrés. Recién Horacio destacaba a algún jugador local, Aguero, Palacio, pónganlen el apellido que quieran, pero Messi ya no es el jugador veintitrés, seguramente va a estar ahí peleando por la titularidad.
Después creo que todos los análisis hay que hacerlos en Junio, como decía Enrique, o sea, te levantás mal un día y pum!!, fuistes. Mucho más en los duelos mano a mano, hay que ver cómo llegan después de una exigente temporada, por ahora Riquelme y Sorín funcionan bien en el Villarreal, pero si siguen jugando bien y ganando partidos, van a jugar más partidos. Si bien en esta temporada hay un descanso de una semana y media más que en el mundial pasado, los jugadores van a llegar con 60, 70 partidos en una temporada exigente.
Recordemos que Brasil fue campeón en el mundial pasado porque un tal Ronaldo había vuelto a jugar después de dos años, tres meses antes y no tenía la carga de partidos que tuvieron ya no sólo Verón y Batistuta por citar ejemplos, sino Zidane, Henry y Trezeguet. Francia y Argentina eran los grandes candidatos antes del último mundial y más allá de situaciones fortuitas de cada partido o de estilos de juego, también se derrumbaron porque no estaban al ciento por ciento físicamente. Zidane se lastimó en un amistoso previo, Henry no podía mover las piernas, creo que la cuestión del descanso después de una temporada tan intensa en la que el jugador no solamente juega para su equipo sino que también juega para su seleccionador, para que lo vea, porque el gol de Maxi Rodríguez no sólo vale para el Atlético de Madrid sino también pensando en la lista de los veintitrés. Entonces es como una carga muy intensa la que tiene el futbolista en la temporada previa. Todo lo que podamos hablar tiene fecha de vencimiento y es fin de Abril y principio de Mayo. Ahí empieza otra historia y creo que Pekerman no debe equivocarse en la lista de veintitrés y después tendrá que ver con un buen descanso, con un entrenamiento que no sea ni liviano ni exigente y también reducirlo al cómo se levanta el jugador y cómo asume que en ese mes se está jugando, entre comillas, su pasaporte futbolero para los cuatro años porque entre mundial y mundial, para el seleccionado argentino pasa muy poco.
E.M.M.:Y retomando un poco lo que decía Pagani en cuanto al desacuerdo con mi opinión, voy a tomar un poco de esperanzas para quizás, darme más optimismo. No hay un jugador, uno, que pueda desnivelar en el fútbol argentino. No hay un jugador que pueda ser realmente la pieza fundamental con respecto a los contrarios y respecto del rendimiento en su propio equipo. Y eso es lo que preocupa. Y preocupa tanto como me preocupó en su momento que éste mismo técnico, que estaba sobre Bielsa en un plano teórico o práctico, eso es responsabilidad de él, desde su dirección juvenil, no pudo sacar un libre que pueda reemplazar al libre que jugaba en la selección argentina y que hoy sigue jugando y que es Ayala pero en una línea de cuatro. Sabiendo que la selección mayor jugaba con tres defensores en el fondo y uno de ellos era el libre, Argentina no fabricó un libre para reemplazarlo. Y el alternativo que tenía y que tuvo fue Nelson Vivas que había quedado lesionado antes, improvisándolo Bielsa, sacándolo del costado y poniéndolo por su velocidad ahí. Quiere decir que el seleccionador alimenta mis dudas y mi preocupación en cuanto a la decisión final. Creo que Messi es un gran jugador pero sobretodo es una gran promesa, todavía no tenemos la medida exacta de lo que puede ser en un nivel de un campeonato del mundo. Entonces yo comparto con Varsky aquello de que Messi debe estar pero también creo que tiene que estar con un gran interrogante al lado. ¿Messi va a solucionar el problema? Si entra él, ¿quién sale?, ¿quién va a jugar?, ¿de qué va a jugar? Y este tipo de dudas, de incertidumbres, las tiene que resolver el técnico, que ha tenido un equipo, que más allá del partido perdido con Inglaterra, el rendimiento en la parte final no fue bueno. En consecuencia, allí uno comenzó a poner, quizás, los ojos con mayor preocupación. ¿Va a jugar con doble cinco? Sorín es un libre,preferido, hasta es el capitán por el técnico, encabeza un grupo de predilección del técnico,¿no? Sorín, Cambiasso, una generación de preferidos por el técnico porque los conoce, porque los ha hecho desde muy pequeños, pero también sabemos que eso marca una diferencia con algunos que ya estaban en el plantel, por ser un poco más maduros.
Pero al margen de ello, considero que, retomando el tiempo a 1958, mi primer mundial, yo creía como hoy creo, más informado, que Argentina tenía LA SUYA, que Argentina tiene identidad. En 1958, el destino de los argentinos era el granero del mundo, arreglábamos todo con alambre, no necesitábamos de tecnología, éramos unos pícaros bárbaros. Sabíamos poco. No competimos en el orden sudamericano porque políticamente no convenía, porque habíamos ganado con brasileños con cierta facilidad. Después tuvimos el cachetazo de 1958 porque no sabíamos adónde íbamos. Un compañero le llevó a Néstor Rossi, me acuerdo en su momento, un informe de una revista francesa acerca de los demás y dijo;"No, dejá, esto no". Ese es el temor que tengo acerca del estilo argentino; "nosotros papá". Entonces después nos fuimos al otro lado. Vino el cachetazo de 1958 y ya no servía nada, todo lo que teníamos se había desvalorizado totalmente. Y se pasó a un tacticismo exagerado. De todas maneras, los jugadores deberían valorar lo que es el aspecto estratégico manejado por un técnico en un momento como éste. Un técnico que tiene que hacer su equipo, que tiene que saber de los rivales que va a enfrentar, evidentemente. Porque si nosotros creímos en el jugador como valor fundamental del fútbol, ¿por qué no pensamos en el jugador como valor fundamental del fútbol cuando juega para el contrario? ¿pensamos nada más en el jugador como valor fundamental en nuestro equipo?, siguiendo la misma corriente de pensamiento. Tiene muy buenos valores, habrá que tener cuidado y saber cómo deben comportarse más allá de lo que se tiene.
Tomando más conocimiento para poder mutar o cambiar como lo dijo el ayudante del técnico en el sorteo;"nosotros estamos preparados para jugar con más de un estilo", hasta ahora el estilo éste no me ha convencido. no es un equipo que....por ahí el de Bielsa, uno pensaba, estando de acuerdo o no, que se apresuraba o se apuraba, o que se parecía mucho a los europeos, pero de todas maneras uno sabía de qué se trataba, sabía como se jugaba, qué se pretendía. Insisto, en acuerdo o en desacuerdo con Bielsa, la cosa estaba más clara. Acá no se sabe bien, acá se fue a jugar a Uruguay, una cosa tremenda!! se fue a jugar a Paraguay y se perdió. ¿Cuál es el equipo? Ese es mi interrogante, es mi pregunta, por eso no soy tan optimista como quiero serlo o como es aquí Pagani, ¿no?
H.P.: Bueno, como dijeron, yo mantengo mi optimismo. y te digo más:Argentina va a estar entre los cuatro primeros. Si no tengo optimismo me hago suicidar.
Para mi ha sido muy importante el partido con Inglaterra porque ese es un partido TEST, no los últimos de la copa (seguramente se refiere a los últimos partidos de eliminatoria) Además yo creo que el técnico ya tiene más o menos nueve jugadores de los que van a ser titulares. A mi me gustaría mucho que definiera sacando a Crespo y poniendo a los chiquitos que juegan, me gustaría qye jueguen Tevez y Aguero o Palacio adelante. Que juegue Messi con Riquelme más atrás, con esos cuatros tenemos buenas posibilidades de jugar bien a la pelota y tenemos posibilidades de gol. Después Mascherano con Cambiasso en el medio, Sorín en el único lugar que puede jugar que es de marcador lateral y Zanetti o algún sustituto en ese lugar, ahí falta uno.
La selección va a jugar con línea de cuatro, lo dijo el entrenador, y confío en este equipo.
La mentalidad ha cambiado, no es la misma situación, decimos Enrique, (hablándole a Macaya Márquez) que lo que pasaba en 1958. La llegada de Menotti a la selección produjo un cambio de mentalidad y asentó esta idea de que con el estilo que nosotros jugamos en Argentina se puede competir estilo contra estilo, pero con buena preparación física, con buen respaldo y consiguiendo seriedad y disciplina en la preparación y en el juego, o sea, en 1958 fuimos a ver de qué se trataba y no teníamos idea de nada. Esa experiencia sirvió, quedó instalado el mensaje en 1978 y me parece que Pekerman lo retoma. A lo mejor le cuesta decir sus cosas públicamente. Él manejó las selecciones juveniles dentro de este estilo y dentro de este estilo jugó el partido con Inglaterra. Y yo digo que hay que tenerlo en cuenta porque es un rival de los díficiles para jugar y un rival bien europeo. Se puede ganar o perder, todos los partidos son una novela en que no se conoce el final a priori. Pero digo que jugando de esta manera como propuesta, ajustando todos los detalles posibles, sumando todos los jugadores, como dice Juan Pablo, de que no se equivoque Pekerman, el equipo puede andar bien. Pero claro, por ahí se equivoca no por lo que elegimos nosotros sino por lo que cree él. Cada uno va a tener sus veintitrés jugadores. Yo creo que lo va a llamar a alguno de los Aguero o Palacio, o los dos, pero son delanteros. También se necesita a alguno en la defensa porque es verdad que Ayala no tiene un reemplazante natural, porque Coloccini está jugando como lateral, Heinze tiene que volver de la recuperación y Samuel tiene que hacer su progreso porque está jugando mal.
Riquelme, persona que yo admiro, y que no está al nivel de Maradona por supuesto, es un jugador desequilibrante, un jugador capaz de hacer jugar a un equipo. Es un jugador capaz de entrar en uno de esos equipos chicos, ponerlos en circulación y hacerlos participar en cuestiones de punta en un lugar como España por ejemplo, que no es poco, jugando bien, nítidamente.
Yo creo que la mejor representación de la idea de cómo se juega el fútbol argentino la da el Villarreal, que tiene muchos jugadores argentinos y que tiene un entrenador que procesa la idea. Digo yo que cuando se puede poner en circulación a un equipo de esta naturaleza, que no tiene historia, que no tiene la fortaleza de un grande y en un lugar como España y estar jugando ahora la copa de campeones y haber pasado de ronda, tiene muchísimo que ver con Riquelme porque todo el equipo juega en función de su creación, él es un estratega, yo creo que no hay otro en el mundo como Riquelme.
Sabemos que el mejor jugador del mundo es Ronaldinho y que Brasil es el candidato fijo para ganar el mundial porque, más allá de los entrenadores y sus circunstancias, siempre saben, en base a su estilo propio, a qué juegan. Nosotros tenemos que defender el estilo, creo que este es el compromiso porque lo demás crea confusión, entonces, sabiendo que el entrenador puede hacerlo y que hay material para ello, yo confío en que este equipo va a pasar bien el mundial.
J.P.V.: Creo que lo más importante también pasa por analizar a los jugadores. En los mundiales de Francia y Corea-Japón, hubo absoluta dependencia del jugador argentino en Europa para armar el seleccionado, porque había jugadores que ofrecían garantías, el Ayala de hace cuatro años estaba en un nivel muy superior a éste, Crespo jugaba más y hacía más goles en Italia que los que hace ahora en Chelsea y que compite justamente con Drogba, Aimar en Valencia venía de ser campeón de liga superando al Real Madrid y al Barcelona y teniendo un rol mucho más protagónico que el que tiene ahora. Creo que ésta también es una situación diferente con respecto a otros mundiales. De golpe aparece Tevez en Brasil en un fútbol absolutamente desconocido para los argentinos, uno recuerda a Doval, a Sorín, no hay muchos jugadores destacados en Brasil y ganando títulos. Aparece un chico como Messi que no jugó un partido en Argentina y se fue a los trece años a España y de golpe el campeonato local empieza a proponerle jugadores al seleccionado, no sólo de los que están jugando ahora sino Lucho González y Mascherano que jugaban hasta hace unos meses en River y ya eran titulares en el seleccionado.
Entonces, a la hora de elegir, ya no es automática la opción de Europa y creo que cuando recién decía de Pekerman de que no se tiene que equivocar, también hay una cuestión de actualidad y de momento. Javier Zanetti ha sido el lateral derecho del seleccionado desde le era Passarella, en 1995, no solo no ha habido un reemplazante, sino que no ha habido una alternativa;Scaloni, Zabaleta, Coloccini, no lo han sido. Lo mismo pasó con Ayala. En los seleccionados juveniles no ha habido una alternativa. Y también es cierto que el primer futbolista que va a jugar en años consecutivos mundiales juveniles y mundial mayor será Messi y tal vez Aguero. Ni Riquelme siquiera jugó el mundial de Francia 1998 cuando había sido importante en Malasia 1997. Claro, estaban Verón, Ortega, Gallardo, también hubo un recambio generacional que no se hace en dos años. Más allá de gustos, para la revista France football , para la Fifa y para los seleccionadores, hubo un solo futbolista argentino entre los treinta mejores que fue Riquelme. Uno de treinta. Uno puede decir"sí, pero este pudo haber estado, Tevez juega en Brasil", pero me parece que, más allá de gustos, es un indicador. Entonces vuelvo a lo de Enrique, me parece que el concepto de equipo es fundamental. Yo creo que Riquelme es el líder y la producción del equipo va a depender mucho de cómo funcione Román, que es un tipo que en las grandes citas no se borra, si uno recuerda cúales son los tres mejores partidos de Riquelme son en una final o en una semifinal. Y acá él sabe que desde el primer partido contra Costa de Marfil el diez de Junio, el equipo va a depender de él y creo que él va a asumir esa responsabilidad positivamente.
Pero no es un equipo que naturalmente hoy tenga once indiscutidos u once jugadores como por ejemplo tenía la selección hace cuatro años, cuando Verón era capo en Italia, Crespo, más allá de si nos gusta o no, Ortega era un jugador para considerar y creo que todos los jugadores titulares del seleccionado estaban en una situacón parecida. Samuel era el muro en la Roma y no esta defensor que intenta de alguna forma recobrar su nivel en el Inter.
Entonces aparece el fútbol argentino con otras variantes y hay un entrenador que eligió 66 jugadores para...¿cuántos partidos? Apareció Battaglia, Demichelis, Palacio, Belluschi, o sea, en la lista anterior, Bielsa utilizó sólo 27 jugadores antes de ir al mundial. Veintisiete!! Y veintitrés fueron al mundial, acá estamos hablando de sesenta y seis!! Gonzalo Rodríguez, Burdisso, Clemente Rodríguez, todos participaron en la eliminatoria. Es una búsqueda demasiado grande y la lista necesita cerrarse. En lugar de banda, lo digo por lo numerosa, tiene que ser un grupo y el grupo se va a formar cuando los veintitrés sepan que van a ir al mundial. Y ahí se crea mística de grupo, se promueven charlas como las que para mi deben darse Riquelme y Crespo, esas sociedades de que de golpe tienen que aparecer. Sorín es líder y Riquelme lo es dentro de la cancha pero el seleccionado todavía no tiene un grupo y esa cuestión de la mística de grupo es importante porque van a estar concentrados durante 40 días.
Porque no es natural la superioridad argentina, deberá confirmarla, deberá comprobarla dentro de la cancha, creo que ahí está el tema. Pero atención que este proceso 2002-2006 tuvo un cambio de entrenador, un cambio en la manera de jugar y un cambio generacional.
Sesenta y seis jugadores utilizó Pekerman en un año, van veintitrés , la tercera parte, cuando antes, en el 2001, ya sabíamos que el equipo era Cavallero, Vivas, Ayala, Samuel; Zanetti, Simeone, Sorín; Verón; Ortega, Batistuta y Claudio López, o el Kily González o Crespo. Uno sabía quien jugaba, ahora no. Entonces eso también influye mucho para ver cómo se para un equipo de cara al mundial. Después cada uno tiene su lista, su equipo, su técnico, pero no son cosas que podamos cambiar nosotros.
E.M.M.:Si uno acepta con entusiasmo que Riquelme es el mejor del mundo, ¿qué pasa si lo anulan a Riquelme?, primera pregunta. Es la pieza fundamental, pero lo anulan, ¿qué pasa entonces? Uno tendría que pensar que Pekerman debiera darle experiencia a Aguero, a Palacio y a Messi. Creo que puede haber funcionamiento de equipo si se acepta que Riquelme debe jugar para el equipo, es lo que yo veo.
Con respecto al líder, yo creo que el líder es otra cosa ¿no? El líder es el que se pone el equipo al hombro y se lo lleva para adelante, es respetado y da el ejemplo. Y la auguria de Riquelme no da para ese liderazgo. En definitiva, creo que , más allá de que un jugador pueda ser el conductor o el que maneje al equipo, como bien mencionó Pagani, con eso no alcanza. En 1978 Menotti consiguió una idea e hizo un campeón, pero fracasó en 1982, quizás con menos orden, quizás con menos idea, más allá de que pudo juntar a gente con Maradona en ese mismo equipo porque si no me olvido estaba Ramón Díaz, Kempes, era un equipo. Y en 1986, el único campeonato del mundo ganado fuera de la Argentina, no recuerdo cuál era el conductor del equipo, el manejador del equipo (con ironía)
H.P.:El conductor de qué año? (sorprendido)
E.M.M.: El de 1986.
De acuerdo con un esquema totalmente distinto, nuevo , se ganó un mundial afuera.
Pero uno dice:"sí, pero jugaba Maradona" Sí lo prepararon para que juegue y llegue Maradona. Y estaba Cucciufo, Brown, había equipo, había funcionamiento, había idea. Se trataba de sacarle a cada una de las individualidades lo mejor que ellos podían darle al equipo. Así funcionó.
Y yo no veo todavía al equipo, no veo la idea de Pekerman, no sé si él no sabe transmitirlo o a mi me cuesta interpretarlo. Por eso es que sigo preocupado.
Hablar de pronósticos para mi es imposible. Lo único que sabe uno es que Brasil sí tiene jugadores que están rindiendo realmente muy bien, esperemos ver cómo llegan. Sabemos que Alemania va a ser muy duro por su condición de local, Argentina va a tener que cruzarse con Alemania o con Brasil si quiere llegar a la final y primero tendrá que clasificarse porque después, aparentemente, le tocaría una segunada etapa un poco más liviana que son México o Portugal, que se van a clasificar en su grupo. Le dejo la palabra a Pagani porque sé que se tiene que ir a trabajar.
H.P.: Voy a decir dos cositas más. Yo creo que si Maradona hubiese jugado para cualquier otra selección en 1986, el campeón era esa otra selección. Fue demasiado influyente la presencia de Maradona en la selección argentina.
Una vez, después del mundial, en una charla que tuve con Bochini, fuera de circulación periodística, me dijo: "si te fijás bien, el ochenta por ciento de los goles que hizo Argentina en ese mundial, fueron a partir de la inventiva de Maradona. y los goles que le hicieron a Argentina fueron pelotas cruzadas que son las que generalmente trabajaba el equipo"
Maradona fue factor desequilibrante absoluto en ese mundial.
En cuanto a lo de los líderes, yo digo que existen los líderes futboleros y existen líderes temperamentales. Passarella era un líder temperamental que además jugaba bien y hacía goles, un defensor caudillo. Pero también existe el líder futbolero como lo era Fernando Redondo, que jugaba de una manera que parecía que no participaba, era capaz de hacer jugar al equipo y lo llevaba para su ritmo. Román es igual, tiene la suficiente capacidad de líder como para hacer jugar al equipo a su condición y se lo pone al hombro sin ser un líder temperamental. Habla lo que tiene que hablar en el grupo y en la cancha.
También digo que no va a haber tanto descanso como se decía, porque, yo hablaba con los preparadores físicos de la selección, Salorio y Urtazún, y ellos dicen que en ese pequeño intervalo que hay entre campeonato y campeonato, esperaban más tiempo y más rotación de los jugadores en sus equipos. Los campeonatos terminan el 14 de Mayo y el mundial empieza el 9 de Junio y si van a tener una semana de descanso, van a tener quince días para preparar a este equipo y entonces ¿de qué manera se podrá establecer esto de darle experiencia a los jugadores? No hay tiempo de darle experiencia a nuevos jugadores. Es el único peligro de estos chicos que están aquí, van a llegar sin roce internacional, esto es así, hay un sólo partido que es el primero de Marzo (Argentina 2- Croacia 3 y el treinta de mayo, Argentina 2-Angola 0) donde seguramente ya se van a conocer los veintitrés jugadores más o menos.
Yo digo que el equipo que jugó contra Inglaterra, salvo un par de variantes, es el equipo que más o menos va a jugar. No hay mucha diferencia. En términos generales, en Ginebra jugó Samuel, puede jugar Heinze y Zanetti no está bien, pero no hay mucho más. Y lo demás son casi todos. Hay nueve jugadores que van a jugar, creo que va a ser titular Messi. Va a haber que preparar al equipo pero sabiendo que no va a haber partidos. Yo tuve hace poquito una charla, digamos, privada con Pekerman de dos o tres horas, diría. Me demostró, por supuesto que no se puede decir lo que se dijo porque justamente era privada la charla, que a lo mejor nos equivocamos cuando pensamos en su personalidad y en su manejo de grupo creyendo que es débil. Porque se decía que como él estaba acostumbrado a los jugadores juveniles no iba a tener para demostrar. Yo creo que ya empezó a demostrar personalidad no citando a Verón cuando se lo enpezaron a reclamar desde el ESTABLISHMENT PERIODÍSTICO, se lo empezaba a reclamar en forma reiterada y él no lo convocó a Verón porque Verón no tiene lugar en este equipo. Está claro.
Aunque le cueste decir lo que piensa, Pekerman sabe lo que quiere, sabe cómo quiere que jueguen sus equipos, conseguir eso que decía Juan Pablo, mística de grupo y convencimiento, algo que debe tener este equipo y yo creo que eso se va a conseguir en la concentración, en el grupo no existen las divisiones que se dicen desde afuera, toda esta cuestión de celos entre Ayala y Sorín por la capitanía, eso es una estupidez.
Yo creo que cuando estemos cerca del mundial, los jugadores saben que jugar un mundial es lo máximo, yo confío en que se van a poner, mental y espiritualmente, en condiciones. Y después saldrán a jugar. Confío en que nuestro estilo le gane al estilo de Costa de Marfil, al de Serbia y Montenegro y al de Holanda.
Si Argentina impone su estilo, puede ganar o perder porque siempre pasa eso, creo que Argentina va a hacer un buen mundial. Y les agradezco mucho a ustedes y a mis compañeros y no voy a seguir diciendo las mismas pavadas de siempre (risas)
J.P.V.;Yo quería agregar una sóla cosa y es sobre la dinámica propia de un mundial. Me parece que esos 15 días van a ayudar muchísimo para llegar al primer partido, si bien Argentina ganó el primer partido del mundial pasado y después se quedó afuera, habitualmente el equipo que gana el primer partido pasa de ronda, después vendrán seis días para preparar el partido contra Serbia y Montenegro, y otros cinco para el encuentro con Holanda, pero ya después el mundial te va llevando por otra ruta, o sea, uno puede preparar hasta el 10 de Junio, pero ya después del primer partido del mundial uno ya sabe como salió Serbia y Montenegro, lo que pasó con Holanda y mira también de reojo lo que pasa con México y Portugal en el grupo D en un eventual cruce, ya empieza la copa del mundo. Son tantas cosas para analizar, todo se define en un mes y hay cuatro años de lo que pasan un montón de cosas, jugadores que aparecen, otros que se van, cambios y todo termina en ese mes. Lo que primero son tres partidos y ojalá después sean cuatro más. Decía Lavolpe en el sorteo (director técnico de México) "nosotros tenemos que llegar al quinto partido", que es cuartos de final y ya después de eso te puede tocar Alemania de local y es todo a noventa minutos, entonces, ¿cuánto de lo que pasa en los cuatro años anteriores influye en esos noventa minutos? También hay que respetar ese carácter diábolico que tiene un partido de un mundial donde en noventa minutos te jugás todo. Y lo que hay en alguna situación de un partido donde te puden favorecer o te puede perjudicar. A España por ejemplo en el mundial pasado los jueces le robaron, le anularon dos goles increíbles contra Corea del Sur, uno de los organizadores. Y se quedó afuera. Está bien, no le pudo ganar, perdió por penales y tienen también alguna responsabilidad, pero del mundial hay cosas caprichosas y que responden sólo a esos noventa minutos que no sabemos cómo se van a dar, nadie puede anticipar cómo se va a dar el primer partido de Argentina y Costa de Marfil. Sí lo que podrá hacer Argentina en base a los jugadores que pondrá, pero ya después, el mundial ofrece una historia totalmente de misterio.
E.M.M.; Bien, no quiero demorar a Pagani, quiero decirle que no encuentro al líder, al rebelde, al mejor jugador del mundo, mi preocupación no da para tanto, mi preocupación está metida acá, en qué es lo que tenemos nosotros más que lo que tienen los demás. Muchas gracias y muy buenas noches (aplausos)
JULIÁN EZEQUIEL LICHENE