La izquierda trotska llama a votar en blanco. No sólo Del Caño, también Zamora. El materialismo dialéctico de Marx o la vida es movimiento, se lo pasan por los genitales. Siempre están en el mismo lugar, con el discurso infantil de: "Somos nosotros o nada". Por eso cuando uno les dice que con ese tipo de actitudes nunca van a llegar al poder y que siempre van a sacar entre dos o tres puntos a nivel nacional, se ofenden y te dicen: "Kirchnerista! Peroncho! Burgués!". Cuando tuvieron la oportunidad de construir algo importante como fue el 2001 y el 2002 en el contexto de asambleas por infinidad de espacios públicos, la izquierda troskista las arruinó, con banderías políticas y querer "copar la parada". La gente estaba harta de los partidos políticos. Lo viví en carne propia.
Son piedras y siempre van a estar en el mismo lugar. A lo sumo se moverán a la derecha para marchar con la Sociedad Rural o con Moyano. Dan pena.
Como da pena en estos días Victoria Donda quien dijo al lado de Del Caño en el programa de Doman, por canal 13: "si vuelven los ´90 mejor, me voy a sentir joven otra vez"...
Por suerte muchos amigos y conocidos que votaron a Del Caño no le van a dar bola, porque saben lo que se juega el país. Saben lo que no quieren. Y no quieren volver a sufrir con el neomenemismo de Macri. El candidato del mercado que te va a llenar el país de dólares para que la clase media compre y se sienta liberada, a cambio de ajuste, devaluación, pérdida de poder adquisitivo y puestos de trabajo. No sería inmediato. Es una lenta venta de espejitos de colores...
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